En el tiempo de conocerse muchas cosas suceden,
verdades a medias son las favoritas de usar,
y yo que era de los que desconfiaban de la gente no me quedaba atrás,
diciendo mentirillas para no mostrarme tan evidente,
a menudo la cagaba irremediablemente.
Más un día como cuando deben ocurrir las cosas,
te topas con otro ser,
un poco más loco, o loca,
en este caso una diabla,
una demoníaca fémina,
un angel sin alas y con unos kilos demás,
una mirada perversa,
y un alma demasiado traviesa.
La conocí paso a paso,
sin afán, y con algo de tacto,
iba con temor a quedar mal,
con vergüenza de mostrar mi ser,
hasta que un día no importó nada más,
y me arriesgué a dejarme ver,
y joder, vaya bendición recibida,
a veces hasta me cuesta creerlo,
pero esa gorda se ha convertido en el maldito amor de mi vida.
Esta noche, el trabajo me demoró un buen rato,
llegué tarde a casa y ella se preparaba a dormir,
se encontraba cansada,
cené rápido para alcanzar a follarla,
sin embargó, no me dio tiempo,
en una somnolencia profunda quedó de pronto.
Y ahí fue,
quieto en mi sitio, me senté a un costado,
ponía algo de música y la observé por un largo rato,
no pasaron más que un par de minutos para que iniciara,
un leve respingo pareció despertarla,
más fue el inicio de una roncadora serenata,
la mitad del "Allegro non molto" de Vivaldi acompasaba los
ronquitos de mi amada, jaja,
la veo dormir tranquila como un bebé,
hay seguridad en su sueño,
me quedo observando durante mucho tiempo,
me acomodo a su lado,
la cambio de postura y deja de hacer ruido,
le robo un par de besos que nunca le devolveré,
la abrazo y entre sueños me corresponde;
humm, si se lo digo despierta pondrá en tela de juicio mis palabras como siempre,
aahh, pero ahora vas a ver que no tienes oportunidad de defender tus dudas...
..."oye fea: te amo de verdad".
🌹Mayer🐉
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