Es imposible hacerse el loco ante la magia de su risa.
Quizá y somos tal para cual, porque decir «te amo» no me nace si no es dirigido a su oído.
Este poema se compone de líneas diversas, porque mil cosas quiero decir al mismo tiempo y con la misma intensidad, que todo se complica al final y termino diciendo cualquier bobada.
Pero mal haría yo en negar estas cuatro letras a mi corazón.
Mal haría yo negarle el amor de un ángel a mi niño interior.
Llegas y todo se compone,
llegas y todo cobra sentido,
apareces como una luz hiriendo a la oscuridad de manera mortal;
dices que soy tu vida y yo me lo creo...
y yo me lo creo.
Porque parece ser verdad,
porque parece que el sentimiento es mutuo.
Porque parece que si el destino te trae de regreso es que debemos estar unidos en este mundo,
o quizá es que no he aprendido la lección y tendré que volver a llorar con mayor desesperación.
Mal haría yo negarle el amor de un ángel a mi niño interior.
Llegas y todo se compone,
llegas y todo cobra sentido,
apareces como una luz hiriendo a la oscuridad de manera mortal;
dices que soy tu vida y yo me lo creo...
y yo me lo creo.
Porque parece ser verdad,
porque parece que el sentimiento es mutuo.
Porque parece que si el destino te trae de regreso es que debemos estar unidos en este mundo,
o quizá es que no he aprendido la lección y tendré que volver a llorar con mayor desesperación.
Si es lo primero, ¡qué rico, sí, diablos!
Si es lo segundo, ¡ilusióname joder!, haz que vuelva a creer que el amor existe y lo pueda comprobar,
haz que logre escribir las cosas más hermosas y consiga sonreír antes de morir.
Si es lo segundo, ¡ilusióname joder!, haz que vuelva a creer que el amor existe y lo pueda comprobar,
haz que logre escribir las cosas más hermosas y consiga sonreír antes de morir.
Malayerba