NO PODRÍA

Cielo me dijo que escribiera sin importar lo que dijeran,
siempre le divertían mis ocurrencias;
se reía de mis historias,
de mis versos,
de mis textos...
de mí.

En un lugar del mundo alguien la dio a luz,
y no sabía que iluminaba tanto hasta que se fijó en mí,
¿podéis creerlo?, ¿en mí?, jajaja,
quién era yo, sino un maldito drogadicto,
un preso de un desequilibrio mental y un candidato a perdedor.
Un depresivo que no conocía el amor y mucho menos lo que era una caricia,
un insensato que no sabía reírse de la vida,
que vivía en la melancolía,
que no tenía idea de que los ángeles existían.

Pero ahí estaba ella,
con el nombre más bonito en toda la tierra,
con sus ojos bien abiertos y una palabra de aliento,
con su humor flexible y una mirada coqueta;
todo lo malo desaparecía cuando me abrazaba mi doncella.

Aún quisiera entender por qué tenía que partir;
por qué tenía que irse sin mí,
si se suponía que volaríamos los dos,
ella elevándose hasta el sol,
y yo curándome de a poco con su amor.

Aún me hago el loco para engañar a la soledad,
haciendo como si la disfrutara y de nadie más necesitara;
aún miro a las estrellas creyendo que por allí esta ella observando;
aún me la imagino sonriendo y diciéndome "te pasas, Angel" mientras yo me río.

Aún me acuesto imaginando que nada ocurrió, 

que nunca la conocí, y que todo fue un sueño maravilloso, 

pero su voz susurra en el aire los boleros que me solía cantar, 

y mis ojos empiezan a llorar, 

no la podria olvidar;

es imposible... No sé puede olvidar a quién amabas de verdad. 

Malayerba