viernes, 5 de julio de 2019

CAYENDO

Nadie me espera en casa,
de llegar no tengo afán,
las calles son más cálidas en mi soledad,
y el alcohol es el benefactor de una noche que siendo gris se pone de color.

Nunca fue necesaria la compañía de personas que no aportaban a mejorar,
nunca fui necesario para alguien porque no tenía nada para dar,
me refugié en los textos de un perverso mental,
me convertí en las palabras de un alienado que pedía a gritos un auxilio mortal.

Ahora vago entre colinas y aceras de concreto,
duermo entre bancas y en laderas de montaña,
la gente me mira y siente pena y asco por mí,
no los culpo, es evidente que nunca debí existir.


Dentro de esta inestabilidad me acomodo,
busco hallar algo de paz entre tanta mierda,
quisiera creer que el mal acabará uno de estos días,
"pero no todas las heridas sanan...

...algunas acaban pudriendo".



🌹Malayerba🐉

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