No era un paraíso perfecto,
pero era uno donde abrazados, arrunchados uno al otro,
siguiendo sabiamente el consejo de las estrellas,
a las que miraríamos cada noche,
podríamos haber dirigido con un buen sentido nuestra vida.
Entre besos y suspiros perfumados con el aroma de las flores,
y la entonación musical de los seres nocturnos,
cada crepúsculo habría de ser mágico si a tu lado me encontrara.
Pero qué hago yo
sentado en medio de un jardín que por más flores hermosas y olorosas posea,
qué hago yo si la luna llena se muestra radiante,
si las estrellas desde donde me hallo se ven bailando en todo su esplendor,
qué hago yo con todo eso, si a mi lado no estás,
si lo más perfecto pierde su razón de ser...
dime qué hago, si tú que eres lo que le da sentido a la perfección no estás ahí en medio.
Malayerba
Hermoso!! Me hiciste recordar un fragmento de algo que leí.
ResponderEliminarMe inspiran los ojos que miran exclusivamente cuando el otro no mira.
El amor todavía no aceptado, pero que habita ya furtivamente por la línea imaginaria donde nunca coinciden.
Muchas gracias, me alegra saber eso. Aprecio mucho tus palabras.
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