sábado, 27 de noviembre de 2021

UN TANGO EN LAS ESTRELLAS

La muerte camina a mi lado y es tan fácil elegir su ruta en el próximo cruce, cruce que ahora veo más insignificante y superfluo.
Surgen ahora muchas razones para no tomarlo, la principal es la que tiene largas pestañas y una cabellera que brilla con los rayos lunares,
ojos color miel y una sonrisa más que preciosa que me cautiva cual si fuese un niño frente a un estante de caramelos.

Tras semanas de no verla la he encontrado cambiada.
He visto un pequeño, pero enorme dejo de alegría, seguridad y poder en su mirada.
No obstante, se me han generado dudas sobre mi obrar.
¡Tengo dudas de saber realmente quién soy!
O si en realidad sé amar, joder, ya no lo sé.

He podido notar la fuerza de su carácter... y he sentido miedo.
Esa mujer despierta en mí un sin fin de emociones desconocidas hasta ahora.
Y siento emerger en mis adentros una motivación progresiva.
En poco tiempo me ha puesto a prueba y eso me ha hecho sentir muy vivo.
Me he sentido pequeño y vaya... qué sensación más espléndida.
Encontrar una mujer que pone a prueba mi cordura, joder, qué dicha.
No es mía, pero no quiero perderla.

Hay demasiado por aprender aún,
hay demasiado por hacer todavía, como hallar el método para despertar el revoloteo de mariposas a la antigua.

También he sido apresurado y un poco tonto, o tal vez demasiado, solo espero me sepa disculpar.
Sabe bien que me gusta un montón y cuesta mucho, pero hago mi mayor esfuerzo por controlar a la bestia que se pudre de ganas por devorarla a besos... Aaaahh, joder, tendré que obligarme a ser paciente y esperar a ver qué ocurre, ojalá sea disfrutar más a menudo del sonido de su risa o bailar con ella un tango sobre un par de estrellas.


Malaya

No hay comentarios:

Publicar un comentario